21 nov 2008

La Carta (V)

Querido Tú,

Los ecos de tu voz llegan lejanos, como si en verdad tan solo fueses ese personaje inventado que quedó varado en la playa desértica donde concibe el destino, escribiendo esencias soñantes que luego plasma sobre cuadernos que apila en sus días.

No te vas y tampoco te quedas, se han parado los relojes en estas cartas, como si hubiese podido concebir el pasado moldeando futuro, soy presente que sueña, fundiendo la calidez de tus manos, imprimiendo versos que jamás llegarás a reclamar a viva voz, quizás, porque en realidad y aunque lo sepas, prefieres quedarte en la retaguardia de la sorpresa, pensar que no es posible que alguien haya podido enamorarse de tus letras.

Y a menudo me pregunto, ¿eres humano?, ¿o tan solo el producto imaginario que yo he concebido?, pero se que lates, se que piensas, se que los sentimientos que ahogas barren hoy mis arenas, aunque sepa, que siempre, serán por y para ella.

A la caída de sol me quedé observando este mar que cubre mi mundo, implorando al cielo que te haga volver la vista, y pensé, que aún no se de que color son tus ojos, y es que ni siquiera conozco el sonido de tu voz, y los gestos de tu rostro son tan solo el puzzle de mis días, piezas inacabadas que me temo jamás formarán figura. Lo se y no resiento, que a pesar de las esperanzas puestas de antemano me queda el concebirte durmiendo, así, siempre, me es más fácil.

¿Y para que quererte? Me he preguntado, cuando soy consciente de que jamás besaré tus labios, si tan solo seré expectativa ante tus poemas, mujer que quema cada silaba que tú, embelleces por ella. ¿Eres amado? Sigo interrogándome, pues llegué a la conclusión de que si no te tengo, si no puedo ser personaje de tus cuentos, entonces, al menos pensarte entre otros brazos que respondan a ese latir que entreveo en las caricias de tus párrafos, que te reclamen en la madrugada sus manos, si yo no puedo, si yo no existo en tu mundo de realidades próximas, entonces, que sea otra la brújula de tus suspiros, que tú, seguirás siendo el dueño de los míos.

¿Vendrás? Y se que no, ¿por qué entonces te escribo?, se quema la pluma en los trazos, y hasta las lágrimas se han cristalizado, me ausento en tu mente si es que algún a vez me pensaste, y la duda de saber si tu sabes, me corroe las ganas de llamarte. Pero hoy por hoy, el silencio, es mi único amigo, el tenerte cerca, aunque tú…no estés conmigo.

Pensé en marchar y no pude, no comprendo que me retiene a estas cartas…quizás y tan solo, mi querida Musa Esperanza.

Fdo. Yo, la que está tan cerca.

Iraunsugue Eternia
Fotografía de google.

9 Atravesaron la realidad:

MATISEL dijo...

Entonces besa las letras que te inspira como si fuera él, y seguro que le llega y te contesta.

Besos, empiezo yo también a enamorarme de ese Tú misterioso, jejejje.

JuanMa dijo...

El silencio es también, demasiadas veces, mi único amigo.

Estas cartas calientan mis noches frías, así que me alegro de que quieras todavía seguir escribiéndolas.

Besos cercanos y vuelos esperanzados.

AdR dijo...

Parece como si "la que está tan cerca" no conociera nada de su amado, al menos eso se desprende por aquello de que no sabe el color de sus ojos. Es como las historias de amor de siglos pasados, cuando la chica esperaba a su futuro marido, un desconocido al que le han endosado por conveniencia y del que hay que enamorarse, con la salvedad de que la protagonista conoce los textos que él escribe, pero no donde.

Sigue el misterio.

Besos

Iraunsugue_Eternia (Laura Butragueño) dijo...

CAMINANTE: jajaja es que pienso no deja a nadie indiferente…besar el cielo, solo por la sencilla razón de que es el mismo que miramos.

Besos.

JUANMA: El silencio y la soledad a menudo son los más fieles amantes. Si calienta corazones y alienta el espíritu, entonces, responda o no, seguiré escribiéndolas…

Un abrazo compañero de vuelos.

ADR: Es que no sabe nada de su amado, se puede estar cerca estando a miles de kilómetros, ¿Qué son en verdad las distancias? Sí, o como cuando la chica se enamoraba de un chico solo con una mirada, y luego él partía lejos y ella quedaba esperando a que volviese para poder intercambiar palabras, mientras, seguramente, escribiría esas cartas o al menos parecidas a estas.

Seguiremos escribiendo.

Besos.

haThus dijo...

Para ser un juego, transmite mucho sentimiento reprimido.

Besos.

Iraunsugue_Eternia (Laura Butragueño) dijo...

HATHUS: ¿Reprimido? No!!!! no lo veo así, no fue escrito con ese fin, los sentimientos siempre salen siempre, la prueba son mis escritos.

Besos enafadados de no me entiendes.

haThus dijo...

Mmmm <<... y la duda de saber si tu sabes, me corroe las ganas de llamarte.>> Es una frase de represión por parte de élla que suspira por él. >>Pero hoy por hoy, el silencio, es mi único amigo, el tenerte cerca, aunque tú...no estés conmigo.>> Esto también parece una represión.
Pero claro está, si voy más allá de lo que tu denominas "un juego" y me planteo el hecho de que estos escritos formen parte de una dualidad. Si la otra cara de estos escritos fuera una situación no tan ajena, podría llegar a pensar que en realidad élla no está reprimida, sino que estos escritos están esperando a alguien que nunca llegó, o que llegó tarde, a leerlos.

Besos de sigo indagando en tu juego

Iraunsugue_Eternia (Laura Butragueño) dijo...

HATHUS: Efectivamente sí, eran para alguien, alguien que ya no leía, no se pasaba, parecía que no quería ver. A veces la única manera de decirle a la persona que duerme a nuestro lado lo mucho que sentimos o necesitamos es a través del anonimato..este sería un caso. Pero finalmente llegó y lo leyó, fue el único que supo ver, que está viendo ahora….

Besos de reencuentro.

haThus dijo...

Mmmm, lo que yo decía, tarde.